Prevención ante la deserción escolar

Zapatos al Aire A. C. 

Montserrat Villarino Ruiz

"En un salón entran 100 niños, de esos 100 solo 64 terminan la primaria, de esos 64 solo 46 acabarán la secundaria, en preparatoria solo 24 terminaran en tiempo y forma. De ellos solo 10 terminaran la licenciatura."

La deserción escolar es un fenómeno que ocurre cuando un joven abandona sus estudios, esto puede deberse a varios factores, por ejemplo: No poder seguir pagando la educación, adicciones, embarazo adolescente, entre otros. La pobreza es una de las principales causas de la deserción escolar. En muchas comunidades, especialmente en áreas rurales o marginadas, las familias se ven obligadas a priorizar el trabajo por encima de la educación debido a los problemas económicos. Este fenómeno afecta a millones de jóvenes en todo el mundo, y sus efectos se extienden más allá de la vida individual de cada estudiante, afectando el desarrollo de países y economías completas.

Por esta razón es que la prevención de la deserción escolar es sumamente importante, como sociedad tenemos la responsabilidad de impulsar a los jóvenes a acabar sus estudios, ya que esto no solo les dará mayores oportunidades laborales, sino que también contribuye a la estabilidad social y el crecimiento económico, tristemente el sistema educativo en sí mismo puede ser una de las causas más importantes de la deserción escolar ya que en muchos casos, los planes de estudio no están adaptados a las necesidades o intereses de los estudiantes, lo que provoca que muchos de ellos pierdan interés en la escuela. 

Además de las razones que ya se mencionaron, existe otra razón sumamente importante: A nivel emocional, muchos jóvenes que desertan de la escuela experimentan problemas de salud mental, como depresión, ansiedad o baja autoestima. La presión académica, el acoso escolar (bullying) y la falta de apoyo emocional pueden hacer que los estudiantes se sientan aislados e incomprendidos. Los jóvenes pueden sentir que no tienen el apoyo suficiente para superar las dificultades que enfrentan, lo que los lleva a abandonar sus estudios como una solución rápida a sus problemas. 

Para combatir este gran problema, una de las principales medidas es garantizar el acceso a la educación a través de programas de becas y ayudas económicas para las familias de bajos ingresos, permitiendo que los estudiantes no se vean obligados a abandonar la escuela para trabajar. Además, se deben crear entornos escolares y familiares más solidarios, brindando apoyo emocional y psicológico a los estudiantes para que se sientan motivados y respaldados durante su trayectoria educativa. Los pasos clave para prevenir este problema también incluyen invertir en la formación de docentes para que identifiquen signos de riesgo de deserción y finalmente, adaptar los planes de estudio para que sean más inclusivos y flexibles, de esta forma evitamos que este fenómeno se siga propagando.

Finalmente, este es un problema que nos afecta a todos y por lo mismo debe de importarnos y preocuparnos, además es mucho más fácil enfocarnos en la prevención en vez de enfocarnos en cómo solucionar el problema cuando ya está hecho. El apoyo a los jóvenes y el enfoque en una buena salud mental y buenas oportunidades es clave, aunque también recomiendo ampliamente siempre buscar opciones de escuelas/carreras/planes que se acomoden con tu forma de ser, que verdaderamente te hagan sentir pleno y que te impulsen a seguir adelante, siempre toma en cuenta que puedes cambiar de opinión, puedes equivocarte, la cuestión es no darse por vencido.